Conductas Criminales
Hay algunos factores que influyen en el desarrollo del comportamiento, ya sean causados genética o socialmente, definiendo el crecimiento y la personalidad de un individuo. Cuando hablamos de una persona desestabilizada mentalmente, podemos observar que la mayoría de los casos se han desarrollado por hechos traumáticos durante su infancia y adolescencia. Existen varias ramas especializadas en este tipo de comportamientos humanos; como son: psicología, psicología forense, psiquiatría, sociología, etc. También existen diferentes causas para un comportamiento o conducta criminal como lo son:
Causas
Las causas biológicas: La biología no puede darnos la
explicación total a la conducta criminal, pero igualmente es obligatorio
reconocer aquellas condiciones fisiológicas, neurológicas, cromosómicas y
anatómicas que puedan determinar algunos de los muchos casos de conducta
criminal. Hoy día las investigaciones giran explorando nuevas, o más
específicas, variables que incluyen una variedad enorme de factores físicos
tales como los niveles alterados de serotonina, alteraciones en el lóbulo frontal,(desorden de déficit de atención), niveles altos
de testosterona
combinados con niveles bajos de serotonina, niveles bajos de colesterol, el
efecto en general de los andrógenos, el efecto de diversas drogas
auto-inducidas (ingeridas), el efecto de traumas y accidentes, el efecto de
traumas en guerras o eventos de estrés en desastres naturales (síndrome
post-traumático), el efecto de la contaminación ambiental y las toxinas,
hiperactividad, problemas cognitivos, el efecto del tabaquismo en la madre
sobre los hijos, efecto del ácido úrico, la predisposición genética, y la
relación entre estados emocionales alterados (depresión y ansiedad), entre
muchos otros.
Causas psicológicas: Plantea que las causas de la conducta están en la herencia, en la genética, en daños congénitos (ocurridos durante el embarazo o en el parto), en exposición a ambientes de contaminación ambiental (en casos de extrema pobreza), por defectos, mutaciones, anormalidades físicas, accidentes, traumas fisiológicos o daño cerebral. Plantea que las personas son particularmente vulnerables en la primera infancia a traumas, complejos, conflictos no resueltos que quedan archivados en el inconsciente. Personas que sufren maltrato infantil, crianzas rígidas o extremadamente laxas (sin estructura ni reglas parentales), relaciones inadecuadas con los adultos, dificultades en la identificación sexual correcta, tienden a desarrollar respuestas emocionales disfuncionales mientras crecen. De no ser atendidas correctamente estas experiencias negativas y ansiógenas permiten el desarrollo de reacciones neuróticas, psicóticas en algunos extremos, que habrán de manifestarse en la vida a partir de la adolescencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario